M'arriba l'escrit d'un bloc titulat The oil Crash, el seu conductor és un científic, Antonio Turiel, físic, matemàtic i investigador de l'Institut de Ciències del Mar del CSIC.
Si reviseu les seves entrades al bloc, observareu que són majoritàriament relacionades amb temes científics, sobretot a l'entorn de l'energia. Per això, en un primer moment em sobta trobar un article titulat La España buena i la España mala.
Simplement vull animar-vos a llegir-lo... Són les reflexions d'una persona que torna a casa després d'estar-hi allunyat una setmana per motius professionals. El viatge de tornada en tren el convida a pensar i a meditar i, el primer pensament que li ve al cap és aquest:
Cataluña será independiente en un futuro no muy lejano.
Ell no és català, no desitja la independència... Medita la frase "sin pena ni alegría, sin anhelarlo ni rechazarlo..." Que el condueix, doncs, a pràcticament assegurar la independència de Catalunya a curt termini?
Els arguments, el raonament, el raciocini... que segurament li prové de la seva professió de científic. No hi ha -diu-. cap projecte que pugui il·lusionar la ciutadania catalana ni espanyola. No n'hi ha cap, excepte el projecte independentista català. Davant de les contínues frustracions de la ciutadania, augmentades evidentment per la crisi econòmica i les consegüents retallades en l'estat del benestar, detecta un abatiment, una certa resignació, una desi·lusió frustrant en els ciutadans espanyols. En canvi, diu:
[...] En Cataluña los promotores del independentismo han actuado con mucha astucia y han sabido canalizar el descontento popular en un proyecto ilusionante. "Que Cataluña sea independiente y las cosas comenzarán a ir bien", vienen a decir, "Abandonemos ese nido de pobredumbre que es España, gestionemos nuestro futuro y nuestro dinero, y las cosas por fuerza nos irán mucho mejor". Y así mucha gente que había perdido, al igual que en el resto de España, la esperanza de que las cosas pudieran mejorar, han encontrado en esta apuesta, en este proyecto político, una nueva ilusión [...]
Parla també sobre qui lidera aquest procés. Senyala que l'Estat espanyol s'equivoca (conscient o inconscientment) quan diu que tot és un tema del president Mas i quatre polítics més:
Desde el Gobierno central de España se percibe este desafío como una boutade de Artur Mas, sin comprender que si éste está al frente del proceso independentista es porque el movimiento por la independencia de Cataluña le arrastra, no porque él lo lidere.
També forma part del seu escrit la reflexió sobre Europa i la seva posició davant la independència de Catalunya:
[...] Mientras tanto, el movimiento independentista catalán va recabando discretamente apoyos por toda Europa [...]
[...] sin darse cuenta (Espanya) de que las cancillerías del resto de Estados europeos (que son las que al final toman las decisiones) permanecen extrañamente calladas, y cuando se les pregunta directamente siempre responden que es un asunto interno de España [...]
El tema de la "legalitat o no legalitat" del referèndum i de la separació:
[...] Por supuesto que separarse de España es ilegal con respecto a las leyes españolas, pero eso no quiere decir que sea ilegítimo: si la mayoría de un territorio quiere separarse resulta difícil de justificar desde un punto de vista moral, que no legal, que no se les tenga que escuchar. Además, no es nunca la legalidad del territorio abandonado la que impide o detiene la secesión: seguramente que cuando los países de Sudamérica se independizaron de España lo hicieron violando la ley española, lo cual llegados a ese punto es completamente irrelevante; lo que verdaderamente cuenta es la legitimidad [...]
Fora d'Europa... Fora de la Unió Europea?
[...] España es un problema para la UE [...] la decadente Unión Europea podría tener buenas razones para desear una Cataluña independiente y en la UE [...]
I el final de l'article és demolidor:
[...] La segregación de Cataluña y el voto positivo de España a su ingreso en la UE tendrá un efecto desestabilizador sobre la sociedad española semejante al desastre del 98. Toda la grandilocuencia de la prensa española riéndose del referéndum catalán se tornará en rictus unos meses más tarde al contemplar estupefacta la entrada del nuevo Estado en Europa. Cataluña ya está, probablemente, perdida para España; pero España debería aprovechar este mazazo del destino para, en vez de encerrarse en rancios esencialismos, emprender un proceso de profunda regeneración política, económica y social. De no hacerlo así la alternativa podría ser que al final haya varias Españas buenas productivas y una España mala que sufra por las deudas de todos [...]
Si el voleu llegir íntegrament, cliqueu aquí
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada